Fotos de la visita de la Colectividad “Njegos de Montenegro” a la Catedral, y de la presentación del
El pasado domingo 12 de marzo, Segundo Domingo de la Gran Cuaresma, dedicado a San Gregorio Palamas, S. E. Obispo Kirilo celebró la Divina Liturgia en la Catedral de la Natividad de la Virgen. Y a la misma asistieron, además de los parroquianos, un grupo de 10 integrantes de la Colectividad “Njegos de Montenegro” de la ciudad de Rosario. Ellos son descendientes de montenegrinos que residen en la mencionada ciudad, y en el ámbito de su Colectividad buscan aprender sobre la fe de sus antepasados, el idioma, la cultura y sus tradiciones.
En el sermón durante la Liturgia, Monseñor Kirilo habló sobre San Gregorio Palamas, a quien se lo commemora el segundo domingo de la Gran Cuaresma, porque este gran Santo del siglo XIV con sus enseñanzas guió a los fieles a la oración del corazón: “Señor Jesucristo hijo de Dios, ten piedad de mí, pecador”. El Obispo Kirilo dijo que “San Gregorio Palamas nos enseñó que Dios es “esencia” y “energía”. Su esencia es inalcanzable, mas sus energías sí son alcanzables. Dios nos bendice y nos da su Gracia por medio de sus energías. En el Monte Tabor Jesucristo se Transfiguró, y esa Luz y esa Gracia que los Apóstoles pudieron contemplar son justamente las energías de Dios, las cuales son accesibles al hombre”.
Al finalizar la Liturgia, el Obispo Kirilo les obsequió a cada uno de los integrantes de la Colectividad “Njegos de Montenegro”, un ejemplar del “Libro de oraciones de la Iglesia Ortodoxa” publicado por nuestra Diócesis.
Luego, en el salón, todos participaron del almuerzo preparado por la Hermana Lidia especialmente para la ocasión.
Finalizado el almuerzo, se procedió a la Presentación del libro “Retazos” de Mirijana Ruzich. En su libro, la escritora cuenta su historia de vida en su ciudad natal de Belgrado (Serbia) durante cada terrible día de la Segunda Guerra Mundial.
Luego, se dio comienzo a un nuevo año de las clases de Catecismo para niños.
