Grupo de Apoyo Espiritual, Psicológico y familiar

La misión San Basilio de Ostrog en Barranquilla, Colombia, por la iniciativa de la señora Escine Rabhany, fiel de nuestra misión, recogiendo la necesidad de varios padres y madres de familia de su entorno para emprender un un grupo que tenga incidencia espiritual y psicológica, así como de las experiencias de la familias para dar pautas en la crianza de los hijos se ha juntado con el padre Esteban Díaz y la Psicológa Beatriz Garcés para emprender esta iniciativa.

El día jueves 07 de Noviembre del presente año se dio inicio a dicha labor que pretende fortalecer los valores cristianos en nuestra juventud. Por ser la primera reunión se discutieron temas organizativos, pero al mismo tiempo se reflexionó en torno al texto bíblico de San Lucas (7: 11-16), que correspondía al del domingo pasado, en nuestra liturgia. Reconociendo que ante el dolor de una Madre Jesús actúa por iniciativa propia, sin pedirle nada antes o preguntar qué pasaba, por eso la iniciativas de las madres por sus hijos llevan en sí una carga emotiva muy profunda que si se une a la Gracia Increada Dios pueden producir abundantes frutos, también se hizo resonancia de la frase tan impactante de Jesús ante el joven muerto: "Joven a tí te digo: Lavantate" pues no sólo Jesús da señales fehacientes de que es el Mesías esperado, es el consuelo de toda la humanidad, pues resolvió el último problema de la humanidad: la muerte. En su vida sobre esta tierra y ahora desde la gloria junto al Padre nos repite: "No llores", porque el sufrimiento no ha de tener cabida en el fiel cristiano sino ser la antesala de la alegría de vida unida a Dios (Theosis).

La psicóloga Beatriz, también compartió sus impresiones sobre todo recordando que no podemos ser amigos de los hijos, sino ser sus padres, pues si no somos el reflejo de una autoridad pronto no nos serán obedientes y menos podrán acatar las normas en la sociedad y se mostrarán rebeldes a todo lo que no sea de su antojo.

Luego en la reunión se dio espacio para crear ciertas manualidades, que pretenden ser una forma diferente de recrearse y no depender de la tecnología. Compartiendo una rica merienda con todos los presentes.

Damos gracias a Dios por este espacio y la oportunidad de contribuir a la formación de nuestros hijos e hijas.