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Se celebró San Sava en la ciudad de Buenos Aires




En la ciudad de Buenos Aires, el pasado domingo 26 de enero se celebró a San Sava, Primer Arzobispo de Serbia, en la Parroquia y Monasterio San Sava de la Diócesis de Buenos Aires, Sur y Centro América de la Iglesia Ortodoxa del Patriarcado Serbio. El Obispo diocesano, Su Eminencia Kirilo, invitó para la ocasión a Su Eminencia Reverendísima Iosif, nuevo designado Arzobispo Metropolita de Buenos Aires y Sudamérica del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla. Oficiaron junto con los Obispos el presbítero Esteban Jovanovich, el Presbítero Boris Gladyshev y el Presbítero Milenko Ralevic. Su Excelencia la Embajadora de Serbia en la Argentina, la sra. Jela Bacovic, también estuvo presente. Un gran número de fieles tanto serbios como de las hermanas Iglesias Ortodoxas Rusas y Antioquenas asistieron para rezar juntos al agradable a Dios Santo Sava.


Al final de la Liturgia se ofició el servicio de la “Slava” por la Fiesta Parroquial de la Parroquia y Monasterio San Sava, y se bendijo el Pan (Kolac) en oración por los miembros de la Parroquia y Monasterio, y el trigo (Zhito) en honor de los fundadores fallecidos del templo.


El Obispo Kirilo como anfitrión agradeció al Arzobispo Iosif por venir a concelebrar la Divina Liturgia Episcopal y debido a que no podrá estar presente en la Entronización del Arzobispo (a fines de febrero) aprovechó para felicitarlo por adelantado y obsequiarle una Panagía con el ícono de San Sava. El Arzobispo Iosif visiblemente emocionado le agradeció a Monseñor Kirilo y a todo su clero y fieles por la cordial invitación, por la cual se sintió honrado, y por este obsequio “inesperado, que valoro mucho”. Y Monseñor Iosif en su inspirador sermón, habló que debemos trabajar todos juntos en la Unidad de la Iglesia para que la Ortodoxia en Sudamérica crezca fuerte. Es nuestra responsabilidad dar un testimonio fuerte, el cual sólo se puede hacer en la unión(…) Y hoy tenemos esta continuidad que hoy se ve reflejada en la figura del Santo Arzobispo Sava. Él dejó todo lo que era mundano y se fue a la Santa Montaña a vivir la vida espiritual. Esas personas con su vida santa se transforman para nosotros en símbolos y esos símbolos necesitamos hoy en día”.


Luego todos se sacaron una foto con en apoyo a la Iglesia Ortodoxa Serbia en Montenegro que está siendo perseguida por el gobierno ateo. El mismo aprobó una nueva Ley de Culto con la cual busca que los ancestrales Monasterios e iglesias de Montenegro pasen a ser propiedad del Estado en vez de propiedad de la Iglesia. El cartel fue hecho con la bendición del Obispo Kirilo por el Padre Milenko y sus parroquianos en Venado Tuerto, y traducido al español dice: “Los Apoyamos desde Argentina. No daremos los santuarios”. Esa expresión: "No daremos los santuarios" nació del mismo pueblo montenegrino que salió a las calles con carteles con esta inscripción.


Luego, todos participaron del almuerzo festivo en el salón. Para la ocasión se hicieron restauraciones y se preparó el salón y la Iglesia por la Madre María, Superiora del Monasterio, con la ayuda de fieles. Y el almuerzo estuvo organizado por la Comisión parroquial, también con ayuda de fieles. Agradecemos especialmente al FRIGORÍFICO FRIOLIM por habernos donado embutidos para la celebración. Durante el almuerzo el Padre Esteban comentó la actividad que hacen con la bendición del Obispo Kirilo los niños de Catecismo, diciendo que “así como San Sava hizo especial énfasis en educar en la Fe a su pueblo creando escuelas y e iglesias, de la misma manera debemos educar a nuestros niños desde temprana edad, en la Fe”. Seguido, los niños de Catecismo dirigidos por la Popadija Victoria leyeron cada uno un fragmento de la Vida de San Sava (que compartimos seguido a este texto). También cantaron la canción de San Nikolaj Velimirovich “Vera nasha, Vera Stara, nasha vera Pravoslavna”. Finalmente todos cantamos el Himno a San Sava, el cual emocionó a todos al honrar al Santo que dedicó su vida a aprender la Fe Ortodoxa y a enseñarla a su pueblo para su salvación. Por eso es considerado Equiapóstol e Iluminador de los Serbios. San Sava, ruega a Dios por nosotros!

Presbítero Esteban Jovanovich

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Compartimos el texto de “La Vida de San Sava”, para niños (traducido del libro “Saint Sava, Teacher of Christ´s Commandments – authors Radovan Jakovljevic and Jovan Anicic – Publisher Jovsic Printing Centar – Co-publisher Orthodox Lighthouse, Chicago).



LA VIDA DE SAN SAVA - PARA NIÑOS


Stéfan Nemanja y Ana


Había una vez, en la tierra de los Serbios, un Rey llamado Stéfan Nemanja con su esposa Ana. Ellos tenían dos hijos, Vúkan y Stéfan. Ellos eran personas piadosas y buenos cristianos. Ayudaban a las personas pobres y enfermas, construían iglesias y monasterios y vivían en el piadoso temor de Dios.


Oración a Dios


Stefan Nemanja y Ana amaban los niños. A menudo rezaban a Dios para que les concediera un hijo más. Dios escuchó sus oraciones y les otorgó un tercer hijo, a quien llamaron Rastko. Este fue el año 1175



La infancia de Rastko


Desde temprana edad, Rastko Nemanjic mostró un gran amor a Dios. Él visitaba asiduamente el monasterio dedicado a San Nicolás, que su padre había construido. Allí, él pasaba el tiempo conversando con los monjes acerca de la vida espiritual y los milagros de los santos.



Rastko como Príncipe


Siendo un joven príncipe, a Rastko le fue dada la oportunidad de gobernar una parte de las tierras Serbias. Pero el deseo de Rastko por servir a Dios era mucho mayor que su interés por el reino terrenal. Y por eso secretamente soñaba con una vida distinta.



Las historias acerca de los santos monjes


En esos tiempos, un grupo de monjes Rusos llegaron al reino de Serbia desde el Monte Athos, que es un santo lugar en Grecia. Stéfan Nemanja y Ana los recibieron en su palacio con alegría. La visita de estos monjes hizo que Rastko pudiera oír historias acerca de la maravillosa forma de vida de los monjes en el Monte Athos. Inspirado por esas historias, el joven príncipe tuvo la determinación de hacerse monje. Una noche, él se escapó de la casa de sus padres para seguir a los monjes en su camino de regreso al Monte Athos.



Rastko se hace monje


En el Monte Athos, Rastko se convierte en monje en el monasterio de San Panteleimon y recibe su nuevo nombre monástico: SAVA. La oración, el ayuno y las vigilias rezando comenzaron a ser parte de su nueva vida.



Stefan Nemanja deja el trono y se convierte en el monje Simeón


Stefan Nemanja y su esposa Ana dejan el trono de su Gobierno en Serbia y deciden seguir el camino de su hijo Sava. Stefan Nemanija dio su trono a su hijo mayor, Stefan, se hizo monje con el nombre de Simeón y viajó al Monte Athos donde estaba su hijo Sava, para vivir la vida monástica juntos. Sava y Simeón construyen un monasterio allí, el cual sería luego muy importante. Simeón muere al poco tiempo.



Educando al pueblo Serbio


San Sava llegó a ser el primer Arzobispo de Serbia. Era muy amado por su pueblo. Trabajaba sin cesar en la administración de la Iglesia Serbia y en la educación del pueblo serbio. Construyó muchas iglesias y monasterios, así como también hospitales y escuelas.



La muerte de San Sava


En el regreso de uno de sus viajes a la Tierra Santa en Jerusalén, Sava enfermó gravemente. Murió amando al Señor Dios en la ciudad de Trnovo en Bulgaria, en el año 1235. Muchos cristianos ortodoxos de todo el mundo se entristecieron al recibir esta noticia. Sus reliquias fueron traídas al monasterio de Miléshevo en Serbia. DE ESTA MANERA EL PUEBLO SERBIO VENERÓ LAS RELIQUIAS DE SAN SAVA, EL SANTO HOMBRE QUE LES HABÍA ENSEÑADO LA FE EN DIOS.

El himno a San Sava se cantó por todos los presentes durante el almuerzo

Todos se sacaron una foto con en apoyo a la Iglesia Ortodoxa Serbia en Montenegro que está siendo perseguida por el gobierno ateo. El mismo aprobó una nueva Ley de Culto con la cual busca que los ancestrales Monasterios e iglesias de Montenegro pasen a ser propiedad del Estado en vez de propiedad de la Iglesia. El cartel fue hecho con la bendición del Obispo Kirilo por el Padre Milenko y sus parroquianos en Venado Tuerto, y traducido al español dice: “Los Apoyamos desde Argentina. No daremos los santuarios”. Esa expresión: "No daremos los santuarios" nació del mismo pueblo montenegrino que salió a las calles con carteles con esta inscripción.

Agradecemos especialmente al FRIGORÍFICO FRIOLIM por habernos donado embutidos para la celebración

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