Se dio comienzo al Santo y Gran Concilio Ortodoxo en Creta

Con la oración de invocación al Espíritu Santo "¡Oh, Rey de los Cielos ..." y cantando el tropario de Pentecostés, en la sala de la Academia Ortodoxa de Creta se dio la apertura al Santo y Gran Concilio de la Iglesia Ortodoxa, que su Santidad el Patriarca Ecuménico Bartolomé preside junto con los Primados de las Iglesias de Alejandría, Jerusalén, Serbia, Rumania, Chipre, Grecia, Polonia, Albania y Chequia y Eslovaquia.

Si bien con la ausencia de algunas Iglesias, el Gran Concilio se inició de todas maneras. No están presentes los representantes de las Iglesias de Antioquía, Rusia, Georgia y Bulgaria.

De acuerdo con la estructura del Concilio, cada Iglesia local debe ser representada por su Primer Jerarca y por dos Obispos más. De esta manera, la Iglesia Ortodoxa Serbia es representada por Su Santidad el Patriarca Serbio Irinej, por el Metropolita de Montenegro y del Litoral Amfilohije Radovic y por el Dr. Obispo de Backa Irinej Bulović.

Sobre un total de catorce Iglesias autocéfalas, las ausentes son cuatro: las Iglesias de Antioquía, Rusia, Georgia y Bulgaria. Estas, después de haber aprobado la convocación, las temáticas y el reglamento de la sináxis (reunión de los primitivos cristianos) en enero 2016, a una semana del inicio de los trabajos pidieron una prórroga para la inauguración del Sínodo, invocando varios motivos.

Antioquía invocó divergencias bilaterales con Jerusalén sobre la jurisdicción de la Iglesia Ortodoxa de Qatar; las otras tres han declarado que no estaban en total acuerdo con el desarrollo de las temáticas preparadas.

Ha de aclararse que este no es un Concilio Ecuménico, como los del primer milenio de la Iglesia Universal unida. Los Siete Concilios Ecuménicos se desarrollaron entre los años 325 y 787 después de Cristo. Después del cisma de 1054 entre Roma y el resto de la Iglesia de Oriente – es la primera vez que se lleva a cabo una reunión Conciliar de la Iglesia Ortodoxa, de esta envergadura. Si bien, como fue dicho antes, no participan las 14 Iglesias Ortodoxas locales, se espera que durante las sesiones se discutan los temas que hicieron que las cuatro Iglesias desistan de participar a último momento, para poder luego unirse al Concilio y darle el necesario consenso.

Como los Concilios del pasado, también este último fue preparado e iniciado entre quejas, disputas y ausencias. Al final como en el pasado, se buscará encontrar un “modus vivendi”.

Luego de las oraciones, el Patriarca Bartolomé dio comienzo a la sesión aceptando el pedido del Metropolita de Montenegro y el Litoral Amfilohije: ante más de cien participantes se leyó el pasaje del Santo Evangelio, con la respuesta de Nuestro Señor Jesucristo al pedido de los hijos de Zebedeo de sentarse uno a su diestra y otro a su izquierda (S. Marcos 10:35-45), el cual ilumina con el entendimiento que la primacía, siguiendo el ejemplo del Hijo del Hombre, se realiza con el servicio y con el don de Dios.

Las temáticas ya presentadas y aprobadas en línea de principio, son: la misión de la Iglesia ortodoxa en el mundo contemporáneo; la diáspora ortodoxa, su autonomía y el modo del reconocimiento; el matrimonio y sus impedimentos; la importancia del ayuno; las relaciones de la Iglesia ortodoxa con el resto del mundo cristiano.

Tales temáticas serán discutidas y definitivamente aprobadas en el Concilio comenzado el 20 junio y que debería durar hasta el 26 de junio.